¿Ya te diste cuenta que hay personas más “preocuponas” que otras? Alguna vez has conocido a alguien que se preocupa mucho, hasta por insignificancias? A lo mejor tú eres una de ellas. ¿Te has dado cuenta que hay personas que se ponen más tristes que otras ante un mismo suceso? ¿Has conocido a alguien que se enoja más rápido que tú?
Nuestra mente es como un regulador
Nuestra mente es como un regulador de emociones y funciona según su constitución bioquímica y según las creencias que tiene implantadas. Por ejemplo, una persona que está en depresión se pone más triste que otras ante un mismo suceso, porque su “regulador” de tristeza está mal graduado debido a la depresión. Una persona que padece trastorno de pánico siente miedo extremo ante situaciones que normalmente no dan miedo, porque su “regulador” de miedo está mal graduado debido al trastorno. Pero hablemos de personas que no padecen nada de eso, algunas son más sensibles que otras al miedo y a la tristeza según cómo perciben las cosas.
Recuerdo que cuando iba a la escuela e iba a presentar un examen parcial yo estaba tranquilo, como si nada, total era un simple papel con unas cuantas preguntas que tenía yo que responder, y si no aprobaba no me iba a morir ni me iban a meter a la cárcel, ni me iba a enfermar; simplemente no iba a aprobar una materia. Yo siempre estaba tranquilo y a la hora del examen se me acordaba lo que estudiaba. Pero muchos de mis compañeros, inteligentes o no, estudiosos o no, estaban preocupados, casi temblaban, temerosos de no aprobar, ansiosos, y yo me preguntaba: ¿Por qué se ponen así? Si no les van a hacer una prueba para ver si tienen SIDA o no, no están ante un juicio para ver si los encarcelan o no, no se van a morir si no aprueban, no se va acabar el mundo, ¿cuál es el problema? Yo le preguntaba a alguno: ¿Por qué te pones así?, y respondía: ¿es que no sé si pase este examen, estudié pero está difícil? Y yo decía: ¿y qué? Si no pasas no te van a matar, no morirás, no vendrá un terremoto ni una epidemia, ¿por qué tanta importancia a un simple papel? Y decía: pero es mi examen. Yo pensaba: no es un examen del SIDA.
No hay que preocuparnos mucho
¿Saben que pasaba luego? Que esas personas que se preocupaban mucho se ponían nerviosas, ansiosas y se les olvidaba lo que habían estudiado y sucedía lo que temían: Reprobaban. Y yo que a veces hasta estudiaba menos que ellos presentaba mi examen tranquilamente, como si fuera un juego de niños, como algo normal que no tiene un significado muy importante, no me ponía nervioso ni tenso; y ¿saben que pasaba? Aprobaba.
Hay personas que cuando van a una entrevista importante para conseguir trabajo se la toman muy enserio, le dan mucha importancia a esa simple plática, y al darle mucho importancia se ponen nerviosos, se interrelacionan mal y le dan una pésima impresión a su entrevistador, y todo por darle mucha importancia a esa simple plática. Al fin y al cabo, darle mucha importancia a las cosas hace que suceda lo que temen. Esas personas temen tener una mala entrevista y su temor hace que se cumpla lo que temen como si fuera un profecía dictada por su temor. Una entrevista es una plática con una persona igual que tú, es una simple plática. No te va a entrevistar Dios, el entrevistador es un simple ser humano igual que tú, no te van a entrevistar para ver si respondes mal para que te maten o te encarcelen. Es un simple intercambio de palabras.
No le des mucha importancia a las cosas, que darles demasiada, hace que las cosas salgan mal
Hay personas que tiene pocos problemas y lo andan contando a todo mundo como si fuera algo de lo cual hay que estar orgullosos, se pasan todo el día hablando una y otra vez repetitivamente de sus problemas, se la pasan preocupados y caen en el círculo vicioso preocupación-hablar de problemas-preocupación. ¿Qué ganan por hablar todo el día de los problemas? ¿A caso se van a resolver mientras más los mencionan? NO
Hay otras personas que tiene problemas más graves y más numerosos y no los andan diciendo a cada rato, simplemente allí están, problemas asentados que saben que tienen que resolver en su momento, pero saben muy bien que no tienen por qué preocuparse todo el día por ellos ni tienen que estar contándolo a cuanta persona se topen.
Los problemas son para dejarlos allí a un lado y resolverlos en su momento de la manera más tranquila, no son para pensar en ellos todo el tiempo ni para andar contándolos a todo el mundo para que ellos igual se preocupen.
Y muchas veces esos problemas no son tan importantes, son cosas que no tiene mucho peso en la vida, pero las personas “preocuponas” amplifican el peso. Tienen que romper con ese vicio de estar preocupándose todo el día hasta de lo que va a comer una hormiga, tienen que romper ese vicio que tienen de estar contando todo lo malo de ustedes y de otras personas a cuanto conocido se topen.
Evita platicar de las cosas malas, evitar comentar problemas, evitar mencionar palabras negativas, eso no resuelve problemas, sólo los empeora.
Pensar demasiado en los problemas te preocupa, te pone tenso y te hace menos hábil para resolverlo.
Soy un emprendedor, escritor, amante de los negocios y el desarrollo personal. Me gusta escribir, ya sea poesía, novelas o sobre ciencia. También me gustan los números. En la escuela amé las matemáticas. Me gusta tener amigos y ser sociable, considero que cada persona es un mundo lleno de cosas y maravillas por descubrir
hola
Excelente articulo gracias por colaborarnos
es verdad que las preocupaciones nos roban hasta el sueño.eso es falta de fe, debemos creer más en Dios, que todo lo puede, entreguemos nuestras preocupaciones al Señor.
Preucupación es sinónimo de inseguridad. Falta de confianza ensí mismo. Es el resultado inconcluso de algo que estabamos haciendo. Es la incapacidad de llegar a una conclusión. Es la falta de metodología para llevar acabo nuestros proyectos. Y eso no depende ni de Dios ni del diablo, sinó de uno mismo. El uso adecuado de la Razón y la conciencia dejan de lado la preucupacion. cierto?.