Nadie es indispensable ni insustituible, sólo tus padres para nacer. Los demás, pueden irse cuando quieran
Las cosas materiales se pueden sustituir fácilmente, como un coche, una computadora, un teléfono móvil. Si te lo roban o ya no funciona, puedes adquirir uno igual o mejor. Así, nada es indispensable ni insustituible. Pensamos que eso es sólo con los vienes materiales, pero que no aplica con las personas. Creemos que ciertas personas, sobre todo, cuando nos enamoramos, son necesarias e insustituibles.
Pero, si lo analizamos bien, todo es cuestión de sentimientos. Parece ser que la realidad tarde o temprano nos demuestra que siempre hay otras personas que pueden cumplir las funciones que otra hacía. Claro, no será la misma, ni sentiremos lo mismo, pero eso no significa que sea indispensable ni insustituible.
Ni si quiera los padres genéticos son realmente indispensable ni insustituibles para vivir y crecer. Para nacer sí, pero para lo demás no. Ha habido bebés que pierden a la madre o a ambos padres, y sin problemas crecen con otros familiares u otras personas sustitutas.
Así entonces, cuando pienses que la persona de quien estás enamorado, un amigo o cualquier otra, es indispensable e insustituible, analiza bien la situación, y verás que no es así realmente. Son las emociones y los sentimientos los que nos hacen pensar que sí lo son.
Soy un emprendedor, escritor, amante de los negocios y el desarrollo personal. Me gusta escribir, ya sea poesía, novelas o sobre ciencia. También me gustan los números. En la escuela amé las matemáticas. Me gusta tener amigos y ser sociable, considero que cada persona es un mundo lleno de cosas y maravillas por descubrir
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