Juanito era un niño gordito de 6 años. Cuando iba a la escuela todos se burlaban de él, le decían degradantemente: ¡GORDO!, y el no respondía, simplemente bajaba la cabeza y sentía tristeza. Los demás niños le hacían maldad, le golpeaban y Juanito no se defendía, se sentía inferior. Los otros estudiantes tomaban su mochila y le ponían basura mientras él estaba en el receso. Cuando Juanito iba a sacar su libreta todos se comenzaban a reír al ver que en vez de su libreta sacaba la basura que le habían metido. Las niñas se reían disimuladamente, aunque algunas decían: pobrecito, y sentían mucha lástima por él. ¿Quién admiraba a Juanito? Nadie, sólo inspiraba lástima. Todos los días en los recesos él se sentaba solo en algún lugar de la escuela porque no se sentía aceptado. Los otros niños lo invitaban a jugar para tomarlo como la burla de todos y así divertirse, y a veces, con tal de ser aceptado Juanito jugaba con ellos soportando las burlas. Necesitaba aprobación. Se sentía gordo, feo, tonto, etc. Juanito era el niño bobo, tonto, gordo y sin valor. En ese concepto lo tenían. Sus compañeros decían que era un tonto y que no hacía nada por defenderse. Juanito siguió creciendo y sus complejos se acumularon…
¿Eres o fuiste tú como Juanito? Las mujeres tiene más complejos respecto al peso, a lo mejor eres mujer, tienes unos kilos demás y te sientes identificada con Juanito. No importa quién seas, si pasaste por lo que Juanito pasó, de ahora en adelante esos recuerdos negativos pasarán a ser recuerdos insignificantes, porque HOY, AHORA, TÚ sabes que tienes un alto valor y NO NECESITAS APROBACIÓN de nadie para demostrar lo que vales.
El pasado ya no importa
Si piensas que tuviste un pasado acomplejado y no puedes superarlo, olvídalo, el pasado ya pasó y ahora, HOY, eso ya no vale, lo que hoy vale es el presente, ¿ok?
Recuerda, eres como un lingote de oro que vale mucho. Tu pasado ya no importa, lo que importa es el presente. Nuevamente recuerda, eres como un lingote de oro y siempre has sido así. Si en tu pasado te sentiste como un lingote de lata oxidada y nunca te diste cuenta que eras de oro, no importa, porque ahora ya sabes quién eres y cuánto vales, y ya sabes que NADIE puede degradar tu valor y que no necesitas aprobación de NADIE.
Soy un emprendedor, escritor, amante de los negocios y el desarrollo personal. Me gusta escribir, ya sea poesía, novelas o sobre ciencia. También me gustan los números. En la escuela amé las matemáticas. Me gusta tener amigos y ser sociable, considero que cada persona es un mundo lleno de cosas y maravillas por descubrir
Gracias por escribir esto . Me doy cuenta que soy lo que yo no quiero ser .El miedo esta en mi mente pero no es real.