¿Conoces a alguna persona que le vaya bien en casi todos los aspectos de su vida? ¿Conoces a alguien que tú veas feliz? ¿Alguna vez te has puesto a analizar a esas personas? ¿Sabes qué tienen en común? ¿Sabes que características tienen en su personalidad? Analízalas y descubrirás varias cosas en común.

Mientras, yo te voy a enumerar 7 características que tú deberías tener para ser una mejor persona y vivir más feliz, y estoy casi seguro que las encontrarás en aquellas personas:

1. Tienes que tener un alto valor de ti mismo. No puedes vivir pensando que no sirves, que no vales, que no eres bueno para “x” o “y” cosa. No podemos ser buenos en todo, pero todos somos buenos en algo. Tienes que tener muy claro que tú vales mucho simple y sencilamente por existir, sin importar lo que tienes o no tienes, lo que haces o no haces. Tienes un valor muy alto y cuando lo creas verás que las cosas cambiarán. Cuando camines tienes que caminar con la mirada en alto porque eres de mucho valor, aún cuando los demás no lo sepan. ¿Cómo caminarías si tuvieras muchos millones en el banco, si tuvieras muchas propiedades, si tuvieras mucha inteligencia, si tuvieras mucha belleza, etc.? Caminarías con la frente en alto porque creerías que eres una persona importante de alto valor debido a todo lo que tendrías. Pero tú no tienes que poseer todo eso, tienes que caminar como si lo tuvieras, aún cuando no lo poseas, porque tu valor, tu poder y fortaleza no dependen de esas cosas. Si tu jefe te despidó injustificadamente, si tu novia o esposa te dejó, si crees que nadie te quiere, ¿qué importa? Tú no dependes de ellos, vales demasiado y si ellos no te valoran a ti no te afecta en nada.
2. No debe afectarte lo que los demás digan de ti.- Debido a que tú vales mucho y que tu valor es intrínseco a ti, no te importa si los demás dicen cosas negativas de ti, no te degrada en nada si ellos hablan desfavorablemente de tu persona. Si eres gordo y te dicen gordo de manera despreciativa, o si eres flaco, pobre, poco inteligente, etc., y te discriminan, ¿qué importa? Sabes cuál es tu valor, sabes muy bien que vales mucho y lo que los demás digan sólo te causará risa. Recuerda que las palabras son inofensivas si no las crees. Si ellos hablan mal de ti no te debe afectarte porque tú eres independiente a todas las palabras negativas de la gente y te aceptas tal cual eres sin problema alguno. Si ellos no te aceptan como eres, ellos sufren, pero tú te aceptas tal cual eres, te amas porque vales mucho. No importa las palabras negativas que diga la gente sobre ti, normalmente lo dicen por envidia o porque tienen problemas de aceptación hacia los demás
3. Tienes que entender que todas las personas somos diferentes y tienes que aceptar a todos tal cual son. Si te pasas la vida haciendo hasta lo imposible para que el gato ladre y el perro maulle sólo desperdiciarás tu vida, perderás tiempo, vivirás frustrado, harás bilis y serás un infeliz porque nunca lo lograrás, pues el gato y el perro son diferentes por naturaleza y no pueden hacer lo que tu quieres. Lo mismo pasa si intentas evaluar a cada persona según como quieres que sea. Todas las personas son diferentes, piensan de manera diferente, actúan y se comportan igual de manera diferente, tú no puedes forzar a un hombre para que actúe como mujer, ni a una mujer para que actúe como hombre, tampoco puedes obligar a un pobre que actúe como un rico, ni a un rico como pobre, si ellos lo logran por ellos mismo que bien, pero si no, también. No pueden ser todos doctores, ni todos licenciados, ni todos mecánicos. Todos somos diferentes y cada persona tiene una función. Si a uno le gusta peinarse con el cabello hacia atrás y a ti hacia adelante y lo criticas diciendo que se ve feo su pelo, estás mal, desde allí ya estás sufriendo. Si tegusta peinarte con el cabello parado y a otro le gusta con el cabello acostado hacia la derecha y lo criticas estás mal, cada quien tiene sus propios gustos y tú no tienes por qué estar sufriendo por los gustos de los demás. Acepta a todos tal como son y te ahorrarás frustraciones, corajes, bilis y críticas que nada bueno te aportan. No puedes contratar a un doctor para que componga tu auto ni a un licenciado para que te opere. Recuérdalo bien, no intentes acoplar los gustos y comportamientos de los demás a los tuyos para que los aceptes.
4. Tienes que tener un buen sentido del humor y encontrarle el chiste a las cosas, sean buenas o malas. Las personas risueñas, bromistas y alegres tienden a ser más exitosas que las personas enojonas, serias y amargadas. No te tomes la vida tan en serio, todo tiene un lado bueno. Tienes que tener un buen sentido de humor, vivir alegre, risueño y encontrar la parte risible de todo lo que tú percibes como malo. Te pondré un claro ejemplo. supongamos que una persona te quiere ofender porque eres bajo de estatura y gordo, observa cómo el sentido del humor lo desarma:
   – Estás muy enano, pareces un niño
   – Así es, me veo hasta más joven jaja
   – A mí no me gustaría ser como tú, me daría verguenza
   – A mí me gusta ser así, es más, puedo pasar hasta por debajo de las puertas jaja
   -Además estás muy gordo
   -Ya sabes, uno que se alimenta bien tiene que aprovechar la comida jaja
   -Pero no estás alimentado, estás obeso
   -Pues la comida sobra en mi casa, qué quieres que haga. Si quieres te mando un recipiente lleno para que tí igual ganes volumen, no sea que te lleve el viento jaja

   En este ejemplo la persona ofensiva salió frustrada porque no logró su objetivo, y la otra persona se divirtió con todos los comentarios. Fue como un juego cómico

5. No tienes por qué andarte quejando. Si te duele una muela y te la pasas todo el día diciendo “ay, me duele la muela” ¿crees que el dolor se va a ir por quejarte mil veces durante el día? Para nada, toda tu queja será en vano, mejor quédate callado. Te quejes cuanto te quejes no puedes cambiar las cosas, menos el pasado. Si no tienes trabajo y le andas contando a todos los vecinos que no tienes dinero, que estás necesitado, ¿crees que te va a llover dinero mientras a más gente se lo cuentes? Para nada, esas quejas son inútiles y sólo te perjudican. Si tienes problemas trata de resolverlos en vez de estarlos repitiendo muchas veces. Si se robaron tu auto y te pasas todo el día diciendo “se robaron mi auto, ese maldito ladrón lo va a pagar”, “cómo pude haber dejado mi coche allí”, “si lo hubiera estacionado en otro lado no lo hubieran robado” ¿Crees que por estar pensando o diciendo todo eso el ladrón se va  arrepentir para devolverte el auto. Para nada, de nada sirven tus quejas mas que para acrecentar tu dolor y recordarte a ti mismo a cada rato que tienes motivo por el cual sufrir. Elimina esos pensamientos inútiles de queja. Lo que ya pasó ya pasó, y al pasado jamás podrás cambiarlo por más que te quejes y andes repitiendo tu problema como si te lo estuvieras memorizando
6. No te enojes. Enojarse sólo sirve para causarte dolor. Evita la ira. Si se robaron tu coche y estás airado contra el ladrón ¿crees que eso le va a hacer daño a él? Al único que le hace daño tu ira es a ti mismo, tus enojos te perjudica más a ti que a los demás, desequilibran tu estado emocional. Sé paciente y tranquilo, enojarse no hace que las cosas se compongan, al contrario, las puede empeorar. Si te llenas de ira porque algo no te salió como querías de nada sirve, el enojo no modifica las cosas para bien ni resuelve problemas, sólo te frustra. Tranquilo, el mundo no se está acabado por aquello que te molesta
7. Tienes que pensar que el fracaso no es lo contrario al éxito, si no que es un resultado negativo parte del camino al éxito. Cuando fracases en algo no pienses que lo has perdido todo, tampoco pienses que es lo contrario al éxito que buscas, piensa que simple y sencillamente es un resultado que no está de acuerdo a lo que tú querías. Si quieres un helado de chocolate y te traen uno de coco no quiere decir que esté mal, simplemente no es lo que querías. Si pones un negocio y quiebra, no quiere decir que todos los que pongas quebrarán, simplemente es un resultado que no está acorde a lo que deseabas, pero que sigue siendo un paso más de experiencia y aprendizaje para el éxito que buscas. No mires los fracasos como tal, si no como pasos que te llevan al éxito, pasos que no salieron como tu querías, pero que al fin y al cabo de ayudan a avanzar

Si no tienes estas caracetrísticas, tratas de implementarlas en tu personalidad. Si quieres aprender más te recomiendo el libro Sistema Inmunológico Emocional, haz clic aquí

Marcos

Soy un emprendedor, escritor, amante de los negocios y el desarrollo personal. Me gusta escribir, ya sea poesía, novelas o sobre ciencia. También me gustan los números. En la escuela amé las matemáticas. Me gusta tener amigos y ser sociable, considero que cada persona es un mundo lleno de cosas y maravillas por descubrir